Arvid Jansen lleva una vida solitaria y sin ambiciones. En noches de insomnio, recorre sin rumbo la ciudad de Oslo en coche o va de bar en bar, buscando refugio en el alcohol y en la compañía de alguna chica. Un día, un año después de su divorcio, recibe una llamada inesperada de su exmujer, que vive con las tres hijas de ambos en una casa en la que no queda rastro de su pasado en común. Al reencontrarse con la que fue su familia, Arvid no podrá evitar sentir el rechazo de Vigdis, su hija mayor, que sin embargo es quien más lo necesita.
El autor de Salir a robar caballos vuelve a sorprender a crítica y público con una honda narración sobre la vulnerabilidad de un hombre que ha perdido su camino. Aclamado por su minucioso y conciso estilo literario, este relato honesto y lleno de sensibilidad ha recibido múltiples reconocimientos y está considerado como una de las mejores novelas noruegas de los últimos años.